POLÉMICA POR VACUNAS PARA PRIVADOS NO CESA
Las trabas y cuestionamientos para que el sector privado pueda adquirir vacunas contra el COVID-19 siguen complicando al gobierno. Y es que en los últimos días, se ha evidenciado la incomodidad del presidente Francisco Sagasti para que el empresariado pueda comprar las dosis. Uno de los grupos interesados en adquirir vacunas para su personal es la Asociación de Clínicas Privadas (ACP), pues ve con preocupación que de las 41,222 dosis que ha solicitado para sus asociados a nivel nacional, solo se vacunó a 6,849, es decir, solo el 17%.
Alejandro Langberg, presidente de la ACP, aclaró que por el momento no están enfocados en la comercialización del producto, sino en la vacunación de su personal. “Se nota una lentitud manifiesta en las Diris y Diresas, sobre todo en la Diris Centro en Lima, y una discriminación manifiesta del subsector privado”, indicó el médico. En diálogo con la prensa, adelantó que si el gobierno no entrega las vacunas, buscarán la manera de obtenerla mediante la compra a un proveedor. “O de cualquier (privado) que nos permita importar”, precisó.
La próxima semana, el Consejo Directivo tendrá una reunión para evaluar esta posibilidad. Sin embargo, las clínicas no son las únicas que evalúan la opción de vacunar a sus trabajadores por su cuenta. Luis Miguel Ciccia, director de la Asociación de Empresas de Transporte Interprovincial de Pasajeros, señaló que su sector importará 100,000 dosis de la vacuna rusa Sputnik con el objetivo de inocular a sus trabajadores de manera gratuita. Ante la posibilidad de inconvenientes con el ingreso de las dosis, envió un mensaje al presidente Sagasti: “¿Qué prefieres, que se descongelen, que se muera la gente?”.
Agregó que las negociaciones están “bien adelantadas” y que inicialmente llegarán 50,000 dosis una vez realizado el prepago. Sobre el tema, el presidente Sagasti señaló que le pareció una noticia inesperada, debido a que el laboratorio Gamaleya no ha pedido el registro formal de su vacuna. “Por eso hay que tener cuidado. Les pueden vender algo que no está registrado y terminas comprando algo que no se puede usar. Eso es algo que tiene que resolver el laboratorio”, resaltó. Precisó que luego de hacerse un pedido formal de registro, además de toda la información necesaria que han entregado otros laboratorios a fin de hacer una evaluación de la efectividad de la vacuna, “recién se podrá importar”.