UN MILITAR MÁS EN LA CÚSPIDE DEL PODER CIVIL
La designación del general del Ejército (r) Wálter Martos Ruiz en el cargo de premier tiene como único precedente la del teniente coronel EP (R) Óscar Valdés Dancuart, por seis meses, durante el gobierno de Ollanta Humala. Durante la dictadura militar del general Juan Velasco Alvarado, el cargo de primer ministro estaba predestinado a los comandantes generales del Ejército, que a la vez eran ministros de Guerra. En los 12 años de dictadura hubo una retahíla de jerarcas de las FF.AA. en los principales cargos de Estado. No obstante, ha habido algunos destacados militares en cargos de primer nivel durante gobiernos democráticos desde 1980.
Por ejemplo, el general EP Francisco Morales Bermúdez Cerruti, se desempeñó como fugaz ministro de Hacienda y Comercio en el primer gobierno de Fernando Belaunde Terry (1963-1968). Con la designación de Morales Bermúdez en una coyuntura de confrontación con el Parlamento similar al que tiene hoy Martín Vizcarra, Belaunde esperaba disuadir las exigencias de la mayoría parlamentaria de entonces. Casi una década después, Morales Bermúdez asumió la conducción del gobierno militar y, luego, hizo posible el proceso electoral en el que Belaunde retornó al poder mediante el voto popular.
Otro hito de la historia de militares en cargos públicos fue el triunfo de Ollanta Humala en 2011, que significó el ascenso al más alto cargo de la nación por la vía democrática a un teniente coronel (r) del Ejército. Otro general EP (R), Daniel Urresti, resultó el congresista más votado del presente Congreso y lidera al grupo de congresistas de Podemos. Ahora se perfila como un importante candidato presidencial. Otra figura militar que destacó en los años 80 fue el general EP Enrique López-Albújar, ministro de Defensa en el primer gobierno de Alan García. Le propinó importantes derrotas al MRTA en 1989 y en 1990 un comando terrorista lo asesinó a tiros en San Isidro.
Fernando Rospigliosi expresó que no espera mucho de la designación de Walter Martos como presidente del Consejo de Ministros, ya que, a su juicio, es una figura de “más perfil bajo” que su antecesor en el cargo, Pedro Cateriano. “No es mejor que Cateriano. Se trata de un militar autoritario que cree que las cosas se resuelven a golpes. Siempre ha manifestado su interés por extender la cuarentena y poner a militares en las calles, como si solo eso fuera la solución a los problemas de la emergencia sanitaria”, argumentó. Rospigliosi consideró que Martos no tendría problemas para lograr el voto de confianza del Congreso, cuya mayoría, indicó el analista, coincide en algunos puntos con el flamante premier.